lunes, 23 de septiembre de 2024

SEGUNDO MISTERIO GOZOSO. LA VISITACIÓN DE NUESTRA SEÑORA A SU PRIMA ISABEL. MEDITADO JUNTO AL PAPA JUAN XXIII


LA VISITACIÓN

Autor.- Jacob o Hans Strüb.
Fecha de ejecución.- En la actualidad se desconoce la fecha exacta en la que fue realizada esta obra, datándose como una obra realizada hacía el año 1505
Técnica.- Óleo sobre tabla.
Medida.- 80 x 54,7 cm.
Lugar donde se encuentra.- Museo Nacional Thyssen - Bornemisza.
Localidad.- Madrid.
País.- España.

TEXTO DEL EVANGELIO

    En aquellos mismos días, María se levantó y se puso en camino de prisa hacia la montaña, a una ciudad de Judá; entró en casa de Zacarías y saludó a Isabel. Aconteció que, en cuanto Isabel oyó el saludo de María, saltó la criatura en su vientre. Se llenó Isabel de Espíritu Santo y, levantando la voz, exclamó: 

    «¡Bendita tú entre las mujeres, y bendito el fruto de tu vientre! ¿Quién soy yo para que me visite la madre de mi Señor? Pues, en cuanto tu saludo llegó a mis oídos, la criatura saltó de alegría en mi vientre. Bienaventurada la que ha creído, porque lo que le ha dicho el Señor se cumplirá». 

    María dijo: 

    «Proclama mi alma la grandeza del Señor, 
se alegra mi espíritu en Dios, mi salvador; 
porque ha mirado la humildad de su esclava. 
Desde ahora me felicitarán todas las generaciones, 
porque el Poderoso ha hecho obras grandes en mí: 
su nombre es santo, y su misericordia llega a sus fieles
 de generación en generación. 
Él hace proezas con su brazo: 
dispersa a los soberbios de corazón, 
derriba del trono a los poderosos 
y enaltece a los humildes, 
a los hambrientos los colma de bienes 
y a los ricos los despide vacíos. 
Auxilia a Israel, su siervo, acordándose de la misericordia 
—como lo había prometido a nuestros padres— 
en favor de Abrahán y su descendencia por siempre». 

    María se quedó con ella unos tres meses y volvió a su casa. 

Lucas 1, 39 - 56

MEDITACIÓN DEL SANTO PADRE SAN JUAN XXIII

Qué suavidad y qué gracia en aquella visita de tres meses de María a su querida prima. La una y la otra depositarias de una maternidad inminente; para la Virgen Madre la más sagrada maternidad que pueda imaginarse sobre la tierra. Qué dulzura de armonía en aquellos dos cantos que se entrelazan: "Bendita tu eres entre las mujeres" (Lucas 1, 42), de una parte; y de otra: "El Señor ha mirado la humildad de su esclava; todas las generaciones me llamarán bienaventurada" (Lucas 1, 48).

Esta visión de Ain-Karim, sobre la colina del Hebrón, ilumina de luz celestial y humanísima, a la vez, las relaciones de las familias buenas, educadas en la escuela antigua del Rosario rezado todas las tardes en casa, en la intimidad y en todos los puntos de la tierra, donde «sufre, combate y reza» (A. Manzoni, La Pentecoste, v. 6) alguno de nosotros, llamado por una alta inspiración, o el sacerdocio, o la caridad misionera, o un sueño de apostolado que se cumple; o llamados también por motivos legítimos de diversas naturalezas, trabajo, comercio, servicio militar, estudio, enseñanza o cualquier otra razón. Qué hermoso conjuntarse durante las diez Ave Marías de este misterio donde tantas almas unidas por razón de sangre, por vínculos domésticos, por todo aquello que santifica y estrecha los sentimientos de amor entre las personas más queridas, padres e hijos, hermanos y parientes, convecinos o pertenecientes a un mismo pueblo en acto de reflejar, de iluminar, un sentimiento de caridad universal; cuyo ejercicio es alegría y honor de la vida.

ORACIÓN FINAL DEL MISTERIO

Dios todopoderoso, tú que inspiraste a la Virgen María, 
cuando llevaba ya en su seno a tu Hijo, 
el deseo de visitar a su prima Isabel, 
concédenos, te rogamos, que, dóciles al soplo del Espíritu,
podamos, con María, cantar tus maravillas
 durante toda nuestra vida. 

martes, 10 de septiembre de 2024

PRIMER MISTERIO GOZOSO. EL ANUNCIO DEL ÁNGEL A MARÍA Y LA ENCARNACIÓN DEL VERBO. MEDITADO JUNTO AL PAPA SAN JUAN XXIII


LA ANUNCIACIÓN

Autor.- Jan de Beer.
Fecha de ejecución.- Jan de Beer realiza esta obra hacía el año 1520, aunque en la actualidad, se desconoce la fecha exacta en la que fue pintada.
Técnica.- Óleo sobre tabla.
Medida.- 111,5 x 131 cm.
Lugar donde se encuentra.- Museo Nacional Thyssen - Bornemisza.
Localidad.- Madrid.
País.- España.

TEXTO DEL EVANGELIO

    En el mes sexto, el ángel Gabriel fue enviado por Dios a una ciudad de Galilea llamada Nazaret, a una virgen desposada con un hombre llamado José, de la casa de David; el nombre de la virgen era María. El ángel, entrando en su presencia, dijo: 

    «Alégrate, llena de gracia, el Señor está contigo». 

    Ella se turbó grandemente ante estas palabras y se preguntaba qué saludo era aquel. El ángel le dijo:

     «No temas, María, porque has encontrado gracia ante Dios. Concebirás en tu vientre y darás a luz un hijo, y le pondrás por nombre Jesús. Será grande, se llamará Hijo del Altísimo, el Señor Dios le dará el trono de David, su padre; reinará sobre la casa de Jacob para siempre, y su reino no tendrá fin». 

    Y María dijo al ángel: 

    «¿Cómo será eso, pues no conozco varón?». 

    El ángel le contestó: 

    «El Espíritu Santo vendrá sobre ti, y la fuerza del Altísimo te cubrirá con su sombra; por eso el Santo que va a nacer será llamado Hijo de Dios. También tu pariente Isabel ha concebido un hijo en su vejez, y ya está de seis meses la que llamaban estéril, porque para Dios nada hay imposible». 

    María contestó: 

    «He aquí la esclava del Señor; hágase en mí según tu palabra». 

    Y el ángel se retiró.

Lucas 1, 26 - 37

MEDITACIÓN DEL SANTO PADRE SAN JUAN XXIII

     Este es el punto más luminoso, el que une el cielo con la tierra, el más grandioso acontecimiento de los siglos.

    El Hijo de Dios, Verbo del Padre, por quien todo fue hecho de cuanto se hizo en el orden de la creación, asume la naturaleza humana para convertirse en el Redentor y en el Salvador de la humanidad entera.

    María Inmaculada, la flor más bella y fragante de la creación con su "Ecce ancilla Domini", a las palabras del ángel, acepta el honor de la divina maternidad que al punto se cumple en ella; y nosotros, como hermanos redimidos de Cristo, nos convertimos todos en hijos de Dios.

    ¡Oh sublimidad!, ¡oh ternura de este primer misterio!

    Reflexiones: nuestro principal y continuo deber es el de dar gracias al Señor que se ha dignado salvarnos haciéndose hombre y, como hombre, nuestro hermano; y nos asocia con la adopción de hijos a su misma madre.

    La intención de la plegaria en la contemplación de este primer cuadro, además de la perennidad habitual de la acción de gracias, es el estudio y el esfuerzo sincero de humildad, de pureza, de gran caridad, de la que la Virgen bendita nos da un tan hermoso ejemplo.

ORACIÓN FINAL DEL MISTERIO

Señor, tú has querido que la Palabra se encarnase
en el seno de la Virgen María;
concédenos, en tu bondad,
que cuantos confesamos a nuestro Redentor,
como Dios y como hombre verdadero,
lleguemos a hacernos semejantes a él
en su naturaleza divina.
Por nuestro Señor Jesucristo.

PRIMER MISTERIO LUMINOSO. EL BAUTISMO DE JESÚS EN EL RÍO JORDÁN

BAUTISMO DE CRISTO Autor.- Francisco de Goya y Lucientes. Fecha de ejecución.- Goya trabaja en esta obra entre el año 1775 y el año 1780 Téc...